Promoción de Salud, se define como un proceso mediante el cual las personas, familias y comunidades logran mejorar su nivel de salud al asumir un mayor control sobre sí mismas. Se incluyen las acciones de educación, prevención y fomento de salud, donde la población actúa coordinadamente en favor de políticas, sistemas y estilos de vida saludables, por medio de la abogacía, empoderamiento y construcción de un sistema de soporte social que le permita vivir más sanamente. (Fuente: Cartas de Ottawa y Yakarta)

Según la OMS, una ciudad empieza a ser saludable cuando sus organizaciones locales y sus ciudadanos adquieren el compromiso e inician el proceso de mejorar continuamente las condiciones de salud y el bienestar de todos sus habitantes (OPS, 2003).

ENTORNOS EN QUE SE CONCETRAN LAS ACCIONES DE PROMOCIÓN DE SALUD

1) Entornos: Se consideran entornos saludables o promotores de salud, los escenarios comunitarios o locales donde existen oportunidades para el desarrollo individual y colectivo, de mejor calidad de vida y estado de salud, donde se fortalece la capacidad de las personas para afrontar los problemas de su comunidad. Los entornos en los cuales se deben programar las actividades del Plan son:

a. Entorno Comunal
b. Entorno Educacional
c. Entorno Laboral

2) Componentes temáticos: Se consideran componentes temáticos al compendio de áreas que son de prioridad de salud pública del país. Se intenciona que las acciones de los Planes comunales de Promoción de Salud se planifiquen en torno a los siguientes componentes:

a) Componentes temáticos prioritarios:

a. Alimentación Saludable
b. Actividad Física
c. Vida Libre de Humo de Tabaco

Componente alimentación saludable

En las últimas cuatro décadas, la prevalencia de sobrepeso y obesidad ha aumentado tanto en países industrializados como en países en desarrollo, determinado por un aumento de la ingesta calórica y una disminución en la actividad física suficiente.

Factores que influyen, en esta situación son la publicidad de alimentos de alta densidad energética y alto contenido de nutrientes críticos (sodio, azúcares, grasas saturadas y trans); el aumento en el tamaño de las porciones; el entorno familiar que influye en los hábitos de ingesta y estilos de vida de niños, niñas y adolescentes; además de factores asociados al transporte y tipo de ocupación (Jacoby, E. 2004; Kain J. et al., 2005). Además, el ambiente escolar y comunitario facilita el acceso a alimentos poco saludables, proporciona una escasa oferta de actividad física, los alimentos saludables presentan un alto costo y una disparidad de su oferta a nivel de la comunidad. A esto se suma la presencia de fuertes campañas de publicidad de alimentos poco saludables, el aumento de las porciones en alimentos empaquetados y barrios que desestimulan la vida al aire libre.

En Chile, la última Encuesta Nacional de Salud (II ENS 2010) reveló que un 25,1% de la población mayor de 15 años presento obesidad, y un 39,3% sobrepeso. El índice de masa corporal (IMC) promedio para la población chilena adulta fue de 27,4 kg/m2 (sobrepeso). Entre las mujeres se observa una disminución del IMC al subir el nivel educacional, de 30 kg/m2 en el nivel bajo a 26,8 en el nivel alto.

La situación en los niños/as y adolescentes, no es contraria, presentando indicadores alarmantes en todos los niveles educacionales presentan sobrepeso. La prevalencia de obesidad en niños menores de 6 años es de 9.8% (DEIS, 2011) y en escolares de 1º año básico, la prevalencia ha aumentado de un 17% en el año 2000 a un 23.1% en 2010 (JUNAEB), observándose variaciones según comunas del país, predominando en las más australes (Atalah, 1999) y en comunas de mayor vulnerabilidad social (JUNAEB).

La evidencia científica sostiene que las acciones más costo efectivas, son aquellas iniciadas precozmente. Especialmente en aquellos grupos que desde las primeras etapas de la vida, se pueden catalogar como de mayor vulnerabilidad (Canadian Clinical Practice Guidelines, 2006). De esta forma, cobra relevancia la integración de intervenciones en el sistema escolar, mediante acciones de promoción de salud y preventivas, que permitan acoger con programas especiales a los grupos con sobrepeso y obesidad de menor riesgo (Consensus Statement, 2006; AAP, 2003; Burrows R. et al., 2000). Así mismo la promoción de salud no sólo se desarrolla en el entorno educacional, sino que propone intervenciones a nivel comunal y laboral.

La Estrategia Nacional de Salud (MINSAL, 2011) establece objetivos específicos relacionados a la Promoción de Salud en las Comunas y resultados esperados vinculados al componente de alimentación saludable.

Complementando lo anterior, el 6 de julio de 2012, se publicó en el Diario Oficial, la Ley N° 20.606, sobre Composición Nutricional de los Alimentos y su Publicidad. El objetivo de esta Ley, más conocida como “Etiquetado de los Alimentos”, es establecer normas que permitan entregar una información más clara y comprensible al consumidor sobre el contenido de los alimentos, con el fin de orientar a los consumidores en su elección. En su primera parte, establece que todos los participantes de la cadena de producción alimenticia, estarán obligados a observar las exigencias de la autoridad sanitaria, y particularmente deberán dar cumplimiento a las buenas prácticas de manufactura que garanticen la inocuidad de los alimentos.

También establece la obligación de informar en los distintos envases y/o rótulos los ingredientes que contiene el respectivo alimento, incluyendo todos sus aditivos, expresados en orden decreciente de proporciones, y su información nutricional, expresada en unidad de peso o bajo la nomenclatura que indiquen los reglamentos.

En su artículo 4°, establece que los establecimientos de educación parvularia, básica y media del país deberán incluir, en todos sus niveles y modalidades de enseñanza, actividades didácticas y físicas que contribuyan a desarrollar hábitos de una alimentación saludable y adviertan sobre los efectos nocivos de una dieta excesiva en grasas, grasas saturadas, azúcares, sodio y otros nutrientes cuyo consumo en determinadas cantidades o volúmenes pueden representar un riesgo para la salud y que los establecimientos educacionales del país deberán incorporar actividad física y práctica del deporte, a fin de fomentar en sus estudiantes el hábito de una vida activa y saludable.

A fin de complementar la legislación vigente y los objetivos establecidos por la estrategia nacional de salud, se han publicado las guías alimentarias para la población. Estas corresponden a un conjunto de mensajes educativos que adaptan los conocimientos científicos sobre alimentación saludable y actividad física a nuestro contexto.

Componente actividad física

La Estrategia Nacional de Salud (MINSAL, 2011) establece objetivos específicos relacionados a la Promoción de Salud en las Comunas, e incluye la promoción de actividad física en los distintos entornos en que se ejecutan las acciones de promoción. Así se establecen metas e indicadores que apuntan a aumentar la prevalencia de actividad física en la población, en especial, en adolescentes y jóvenes, así como generar procesos de producción de políticas y programas a nivel nacional y local que faciliten la práctica deportiva por parte del conjunto de la población.

La actividad física, según la Organización Mundial de la Salud, es un factor que interviene en el estado de la salud de las personas, y la define como la principal estrategia en la prevención de la obesidad entendiéndola como “cualquier movimiento corporal producido por los músculos esqueléticos y que produce un gasto energético por encima de la tasa de metabolismo basal”. Incluye actividades de rutina diaria, como las tareas del hogar y del trabajo. (Vidarte, et al, 2011)
La inactividad física, es el cuarto factor de riesgo de mortalidad más importante en todo el mundo, 3.2 millones de muertes y 32.1 millones de DALYs . (“años de vida perdidos”).
Respecto del sedentarismo, la Encuesta Nacional de Hábitos de Actividad Física y Deportes, realizada el año 2012 por el Instituto Nacional del Deporte (IND), demostró altos índices de inactividad física (82,79%) en nuestra población. Así, sólo un 17,3% de los encuestados señalo realizar actividad física de manera regular, es decir una práctica de al menos 30 minutos 3 veces a la semana. Sin embargo, en las actuales recomendaciones de la OMS, una persona activa físicamente es aquella que practica 30 minutos, 5 veces a la semana, o 150 minutos en el mismo período de tiempo.
Los resultados del SIMCE de Educación Física 2012 (MINEDUC, 2012), indican que sólo El 9% de los alumnos evaluados, tiene una condición física “satisfactoria”. En promedio el 44% de los escolares tienen sobrepeso u obesidad variando las cifras según sexo, ubicación geográfica y situación socioeconómica.

Recomendación de actividad física, según OMS 2010.

Componente vida libre de humo de tabaco

Chile es el país de América que tiene la mayor prevalencia de consumo actual de tabaco correspondiente a un 40.60% (Hombres 44.2 % Mujeres 37.10 %). Los datos referidos abarcan un rango etario de 15 a 65 años y más . Similares hallazgos se encuentran en las encuestas realizadas por SENDA que evalúa el consumo en escolares de 8ª Básico hasta 4º Medio. De acuerdo al estudio en escolares, realizado el año 2011, por dicha institución, podemos apreciar que los datos de Prevalencia Anual: entre 15-18 años es de 38,5% (Hombres 35,4%, Mujeres 41,5%) y segmentando por años de edad son: 15 años 43.4%, 16 años 49.2%, 17 años 53.8%, 18 años 55.4% (Ambos sexos).

Por otra parte, las causas de muertes atribuibles a tabaco entre los años 2009 al 2010, medidas en números absolutos corresponden a: 15.370 (Hombres 8776, Mujeres 6594), año 2009 y 16.707 (Hombres 9479, Mujeres 7228) año 2010.

En base a los datos anteriormente expuestos se colige que el tabaquismo y sus consecuencias en la salud y costo social, se ha instalado como un tema prioritario de salud pública. La evidencia científica ha demostrado en forma irrefutable la estrecha relación entre fumar y la morbimortalidad por enfermedades cardiovasculares, cánceres y enfermedades respiratorias, entre otras.

La Estrategia Nacional de Salud (MINSAL 2011) en el objetivo 3.2 correspondiente al componente de tabaco, señala las metas que se deben alcanzar para la década 2010-2020, que son las que señalan en la tabla

SITUACIÓN NUTRICIONAL ESCOLARES PADRE LAS CASAS

Durante los meses de Noviembre-Diciembre del año 2013 se realizó evaluación nutricional de todos los alumnos de 1° básico de la comuna de Padre Las Casas, los resultados obtenidos fueron los siguientes.

Gráfico N° 1

Distribución de diagnóstico de obesidad según localización del establecimiento educacional

Grafico N°2:

Distribución de malnutrición por exceso de peso (obesidad + sobrepeso) según localización de establecimiento educacional.

Grafico N°3:

Distribución de prevalencia de obesidad, en escuelas urbanas de la comuna de Padre Las Casas.

Grafico N°4

Distribución malnutrición por exceso de peso (diagnóstico de obesidad + sobrepeso) en escuelas Urbanas de Padre Las Casas.

Grafico N° 5

Distribución de prevalencia de obesidad en establecimientos rurales sector Barroso.

Grafico N°6

Distribución Prevalencia de Obesidad escuelas rurales Sector CESFAM Pulmahue.

Grafico N°7

Distribución prevalencia de obesidad en escuelas rurales sector CESFAM Las Colinas.